Una receta súper rendidora y que le encanta a grandes y chicos. Se pueden comer al plato, en sandwich, como vianda o incluso en picada. Y si querés sumar verduras sin que los peques de la casa lo noten, esta es tu oportunidad. Podés sumar zapallito, espinaca, morrón o lo que haya en la heladera. Esta receta banca la improvisación. Acompañalas con este dip de yogur fresco y vas a ver cómo desaparecen del plato.
En un bowl grande, mezclá el arroz cocido con los huevos, el queso rallado, la cebolla picada, la zanahoria, la harina y los condimentos que más te gusten.
Con ayuda de una cuchara, tomá porciones de la mezcla y dales forma de medallón con las manos. Si notás que está muy líquida, podés sumar un poco más de harina para mejorar la textura.
En una sartén con un poco de aceite caliente, cociná las torrejas a fuego medio hasta que estén doradas de ambos lados.
Mientras se cocinan, mezclá todos los ingredientes del dip en un bowl pequeño. Probalo y ajustá la sal y pimienta a tu gusto.
Si sobraron ¡mejor! Estas torrejas se pueden freezar ya cocidas y te salvan cualquier comida o vianda. Solo calentás y listo.